jueves, 29 de mayo de 2014

Capítulo 72. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Babi

—Estoy muy enfadada contigo. —Murmure mientras ponía una venda en su mano herida. Ambos nos encontrabamos mucho más tranquilos.
—¿Más que antes?
—Mucho más. Lo de Cara ya ni siquiera me importa. ¿Como se te ocurre esa barbaridad? Harry, quiero que tires absolutamente todas las botellas de alchol que tengas.
—¿Qué? No soy ningún alcohólico.
—Pero podrías llegar a serlo. Las botellas fuera.
—Está bien. Pero quédate conmigo.
—Lo haré. —Dije después de pensarlo unos segundos. Ni podía ni quería dejarlo sólo.
—Y... ¿Desde cuando estás embarazada?
—No lo sé, realmente sólo es una sospecha, tengo nauseas y se me ha retrasado el periodo asinque.
—Casi la cago... —Se tapó la cara con ambas manos.
—Si. ¿De verdad pensabas hacerlo?
—Pues si. Si tu no hubieras llegado seguramente en este momento estaría muerto.
—¿Y que crees que hubiera pasado con Anne? ¿Y conmigo? ¿Y con este supuesto bebé? Eres un inconsciente Harry. 
—Lo sé, lo siento. No pensé, sólo me dejé llevar por mis emociones. Me sentía literalmente como una mierda. Yo sólo veía hasta ahí, sólo sabía que me habías dejado.
—Cada vez que pienso que hubiera pasado si hubiera arrancado el coche y me hubiera largado de aquí me entran ganas de morirme. —Me senté en el sofá. De nuevo el nudo en el estómago.
—No digas eso. —Harry me rodeó con sus brazos y me apoyó en su pecho. Y comencé a llorar de nuevo. —Sh, no llores pequeña. Estoy aquí, no ha pasado nada, ¿vale? Tranquila nena, no voy a ir a ninguna parte.
—Más te vale, imbécil. —Le abracé con todas mis fuerzas.
Soltó una risilla y me besó la frente.
—Quiero llevarte a un sitio.
—¿A dónde? —Pregunté.
—Tengo una casa en una playa abandonada de por aquí... Si tu quieres podemos...
—Podemos.

Narra Sophia

Miré el reloj. Las siete de la tarde. Esto del cambio horario más la noche de bodas... Miré a Liam, parecía un bebé, con la cara pegada a la almohada y la boca en forma de piñón.
Ambos estábamos cubiertos por una simple sabana blanca. Le acaricie la espalda suavemente y después dejé un beso en su hombro.
—Buenos días... —Dijo sonriendome.
—Buenos días.
—¿Que tal?
—Cansada, nos llevará tiempo acostumbrarnos a esto. —Dije y reí un poco.
—Total, sólo estaremos aquí dos semanas... —Se incorporó. —Me gustaría ir a dar una vuelta. Hay unas discotecas muy buenas por aquí.
—¿Podría ser mañana? Tengo demasiado sueño como para salir ahora.
—Bueno. —Me besó la mejilla. — ¿Has hablado con L.A?
—Aún no, ahora serán las siete de la mañana allí. ¿Quién va a estar despierto? Nadie. —Dije riendo.
—Tienes razón. Bah, ya llamaremos. De momento lo único que me importa eres tú. —Se apoyó en la cabecera de la cama y me acogió entre sus brazos. —¿Eres feliz?
—Mucho. —Le sonreí. Liam me besó lentamente.
—Yo también. Así será a partir de ahora. Y pronto llegarán los niños. ¿Cuántos quieres tener?
—Con uno vas sobrado majo.
—¿Uno? De eso nada. Mínimo dos. Un niño con el que jugar y una princesa a la que cuidar y consentir.
—¿Y si salen dos niñas, o dos niños?
—Seguiremos intentándolo.
—Claro, como usted mande mi capitan. —Me burle.
—Te amo. —Me besó.

Narra Alice

—Date prisa, es el único vuelo disponible. —Dijo Niall.
—¿De verdad quieres hacerlo?
—Claro que si. Vamonos ya, anda.—Tiró de mi.
—Espera.
—¿Que pasa ahora?
—Solamente era una prueba. En realidad no quiero casarme aún. —dije.
—¿Qué?—Dió un grito ahogado.
—Pues eso, solamente te estaba poniendo a prueba. Para ver a donde eres capaz de llegar, ya sabes.
—No puedo creerlo..
—Lo siento. Aunque ya que estamos aqui... Elige sitio.
—¿Como que elija sitio?
—Estás cortito hoy. Que elijas destino. Después de todo si que  nos vamos de viaje.
Miró el cartel de los vuelos disponibles durante un buen rato.
—Paris. —Dijo.

(...)

martes, 27 de mayo de 2014

Capítulo 71. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Amber

Abrí los ojos. La ciudad de Los Ángeles se dejó ver al completo ante mi. Zayn me había llevado al cartel de "Hollywood", y allí estábamos, dormidos en el capó del coche, aún con la ropa del día anterior.
Me dolían todos los huesos del cuerpo. Me bajé y me estire al mismo tiempo que contemplaba el hermoso paisaje.
—¿Cuanto tiempo llevas despierta? —Preguntó Zayn frotándose los ojos.
—Apenas unos minutos. Esto es precioso Zayn.
—Ya lo creo. —Estiró el brazo y me atrajo hasta el. —Ese vestido es... —Se mordió el labio, y comprendí perfectamente a que se refería.
—Esos labios son... —Dije sonriendo.
—Este culo es... —Me dió un tortazo.
—Malik, ya, te pasas. —Dije riendome.
—Lo sé. —Me besó la palma de la mano. —Eres consciente de que Eiza lleva casi 24 horas con tu primo, ¿verdad?
—Suerte que Zack y Mike están por allí, que sino...
—Quizás no sea una suerte. Envenenaran a mi hija en mi contra. Logan al menos... Me... Respeta.
—En el fondo te quieren. Logan también. Ellos quieren lo que yo quiero asinque... —Me encogi de hombros.
Sin decir nada, me abrazó, y yo le correspondi. Acaricie su pelo oscuro suavemente. Noté como se le erizaba el bello.
—Te encanta que te acaricien.
—Las caricias no me sirven de nada si no me las das tú. —Susurró en mi oído.
—Pero que poético que eres.
—Lo sé, una de mis facetas. —Dijo sonriendo. —Vamos anda. —Me besó y entramos en el coche.
Recogimos a Eiza en mi antigua casa y nos fuimos a descansar un rato.
Lo primero que hice al llegar fué darme una ducha. Me puse una sudadera de Zayn, unos shorts y bajé al salón. Zayn estaba adormilado en el salón, con la niña en brazos.
—Cariño, puedes ir a ducharte, yo me quedo con Eiza. —Le susurre.
—Toma. —Me la entregó, besó mi frente y caminó lentamente hasta las escaleras. Estaba completamente agotado, y yo también.
Dejé a Eiza en la mini cuna y fuí a hacer algo de comer.
Preparé unas hamburguesas, la verdad, no tenía ganas de hacer algo más complejo. Escuché como unos pasos se acercaban.
—Huele bien.—Dijo Zayn.
—No me he matado preparando la comida pero al menos quitan el hambre. —Le entregué una.
—Muchas gracias amor.
—¿Has hablado con Liam y Sophia?
—No, aquí son las dos de la tarde por lo que en Sidney son doce horas más, deben de estar agotados asinque he decidido esperar a que llamen ellos.
—Sidney... ¿A donde iremos de luna de miel? —Dije emocionada.
—Como muy lejos a la casa de Harry en la playa, tengo muy buenos recuerdos de aquel día. —Me guiño el ojo.
—Enserio. Estaba pensando algo como París, la cuidad del amor.
—Y yo estaba pensando en algo como Nueva Jersey, la ciudad barata.
—Zayn. —Le regañe. —Se supone que esos días serán recordados como los mejores de nuestras vidas.
—Lo siento, esos puestos ya están cogidos. Los mejores días de mi vida fueron cuando te conocí y cuándo nació mi niña.
—Supongo que tenemos tiempo para decidirlo.
—Amber, no sé porque te preocupas tanto. Sabes que cuándo lleguemos a la cama, me beses el cuello y hagas tu magia caeré rendido a tus pies y haré lo que me pidas. Una vez recupere la cordura, me daré cuenta de que lo que me has pedido me costará un ojo de la cara pero será demasiado tarde asinque. —Se encogió de hombros.
—Tienes razón. —Me senté sobre sus piernas. —Quizás... Debería empezar a convencerte.
—Quizás. —Susurro sobre mis labios.

Narra Babi

Me despertó el sonido de mi móvil. Tanteé la mesilla y lo cogí. Era un mensaje de la compañía orange. Putos panchitos, no tienen otra hora mejor para dar por saco.
Dejé el teléfono en su lugar y me acomode para continuar durmiendo. Note la ausencia de algo en la cama, más bien de alguien. Harry no estaba.
Alomejor recuerda lo que pasó ayer y no se ha atrevido a enfrentarme.
Me levanté de la cama y fuí al baño. La ducha estaba encendida.
—Buenos días. —Dijo Harry.
—Hola. —Cogí mi cepillo de dientes.
—Creo que podría hacerte un hueco aquí. —Dijo con segundas.
—No, gracias. Me duele la cabeza, prefiero esperar.
—¿La cabeza? ¿Hablas enserio? —Asentí. —Como quieras. —Cerró la mampara de la ducha con cierta violencia. Que se enfade si le da la gana, yo tengo más derecho que él a estar molesta.
Terminé de cepillarme los dientes y fuí a ducharme al baño principal. Tampoco era plan de estar esperándole todo el día.
Me puse unos jeans ajustados, una camiseta básica celeste, de manga corta y unas vans del mismo color.
Bajaba las escaleras cuándo noté un dolor muy fuerte. Me apoyé en la barandilla.
—Ahora no. —Dije, sospechando cuál podría ser la causa de ese mareo.
—¿Babi? ¿Estás bien? —Preguntó Harry.
—Perfectamente. —Caminé como pude hasta el salón. No quería verlo, ni oírlo. Ni siquiera olerlo.
—Te veo pálida, mareada. Déjame ayudarte. —Me sujetó delicadamente por la cintura.
—No necesito tu ayuda. Sueltame.
—¿Te pasa algo conmigo?
—Lo cierto es que si. —Dije cansada de toda esta situación.
—¿Qué?
—No quiero hablar de eso ahora. —Intenté zafarme de el, cosa que no conseguí.
—Pero yo si, y vamos a hablar. Ya estoy harto. —Dijo en tono autoritario.
—No me chilles.
—No te he chillado, como tu dices. Estoy cansado de tus desprecios. Dime, ¿que le he hecho ahora a la señorita?
—Te has liado con tu ex, delante de ella. —Dije de lo más chula que pude. Harry se quedó blanco como el mármol. —¿No piensas negarlo ni nada?
—Lo cierto es que no me acuerdo...
—Claro, el señor no se acuerda. —Me quité sus manos de encima.
—Babi....
—¡No! Ni Babi ni hostias. ¿No te bastaba con una? Querías dos, ¿cierto? Para así demostrar lo machote que eres. Bien, tienes a dos mujeres muriéndose y peleándose por ti, ¿te sientes ya como un hombre? ¿O necesitas engañar a otra tonta más?—Me retiré una lágrima de la cara. —He perdido toda mi confianza en ti, y déjame decirte que era mucha, demasiada quizás.
—Yo te a...
—Ni lo digas, porque no te voy a creer. Has destrozado mi vida Harry Styles. Me largo de aquí, ya no quiero seguir más contigo. Vuelve con tu adorada Cara. Te odio. —Dije y subí las escaleras rápidamente.
Una vez llegué a la habitación, me dejé caer al suelo y comencé a llorar. Acababa de decir la mentira más grande de toda mi vida.
Recogí todas mis cosas y eché un vistazo a mi alrededor. Había sido tan feliz entre estas simples cuatro paredes... Y ahora soy la chica más infeliz del mundo. No sé si sería capaz de vivir sin Harry, y corriendo el riesgo de estar embarazada.
Bajé las escaleras lentamente. Harry no estaba en el salón. Le importaba una verdadera mierda lo que pasara conmigo.
En el fondo esperaba que al menos intentara detenerme.
Con toda la furia del mundo acumulada en mi interior, abrí la puerta de la calle. Mi furia cesó cuando ví a Harry frente a mi, de brazos cruzados.
—No te vas a ir. —Dijo.
—Puedes apostar que si. No quiero verte más.
—No sé que hice en esa fiesta. No sé si me enrollé con Cara o no. Lo único que sé es que la cagué y no quiero perderte por ello.
—Ya lo has hecho. Déjame en paz.
—Babi, no me dejes. —Se puso de rodillas frente a mi. —Si te vas yo no quiero seguir viviendo. No puedo vivir sin ti.
—¿Que quieres decir con eso?
—Lo sabes perfectamente. Eres lo único bueno de mi vida, la persona a la que más he amado y por la que lo daría absolutamente todo. Tu entendiste una luz en ls habitación oscura que era mi vida. Si te vas, la luz lo hará contigo y prefiero morirme antes de volver a una oscuridad mayor.
—Dices que si me voy te matas, ¿no? No vas a conseguir manipularme. Eres lo bastante mayorcito para saber lo que haces. Déjame irme, no quiero verte.
—Está bien. —Se hizo a un lado. —Lo único que te pido es que no olvides lo que una vez tuvimos. Los buenos momentos juntos. Ojalá pronto encuentres a alguien que pueda hacer lo que de ahora en adelante yo... —Hizo una pausa. —No podré. Nunca olvides que te amo. —Entró en la casa.
¿Acaso se acababa de despedir? Subí las maletas al coche y me quedé allí sentada. Harry puede ser muy impulsivo, sobretodo cuando bebe.
—Que no le pase nada. —Pedí. Tenía un nudo en el estómago.
Después de unos 15 minutos, decidí arrancar. Iba a hacerlo cuándo escuché una cristalera romperse.
Me bajé del coche rápidamente y corrí hasta el interior de la casa.
—¿Harry? —Lo llamé.
Fuí a la cocina. El ventanal del patio estaba roto, Harry tenía una mano llena de sangre y con la otra sujetaba una botella de whisky.
—Vete, no quiero que veas esto. —Dijo y le dió un buche a la botella. Tenía los ojos rojos e hinchados, en otras palabras; estaba llorando.
—Harry, para. Deja la botella.
—Te he dicho lo que voy a hacer Babi. No soy más que un puto bastardo. —Dijo tambaleandose de un lado a otro. Cogió un cuchillo del cajón. —Vete ya.
—No, no Harry, suelta eso.
— Lo haré, en cuanto te vallas.
—Ni hablar, sueltalo.
—No me dejas otra opción. Una vez más, lo siento. —Dijo y levantó el cuchillo para clavarselo a si mismo.
—¡No lo hagas! Porfavor. —Lo paré, ya no podía contener las lágrimas. —No me puedes dejar sola, estoy embarazada Harry. —Dije, y el cuchillo cayó al suelo. Harry se había quedado estático.
Me acerqué a él y lo abracé tan fuerte como pude, mientras lloraba desconsoladamente. Había estado a punto de perderlo, para siempre.
—Eres tonto, como has podido intentar esto siquiera. ¿No te das cuenta de que me haces más daño a mi que a ti? —Le reclame, y noté sus brazos apretarse en mi cintura, haciéndome sentir protegída.
—Tu me odias..
—Yo te amo pedazo de inútil. Más que a nada. —Dije llorando. ¿Que hubiera pasado si me hubiera marchado?
—Lo siento mi vida, de verdad, no quiero dañarte. —Me acaricio el pelo.
—No quiero que vuelvas a hacer esto nunca más. No quiero que te pase nada. Me volveria loca. Porfavor. —Hundi mi cara en su cuello, aún con un nudo en la garganta y sin poder parar de llorar.

(...)

martes, 20 de mayo de 2014

Capítulo 70. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Alice

—Horan, estoy aquí, por si no te habías dado cuenta. —Dije, ya estaba cansada de su indiferencia.
—Como para no darse cuenta. —Me repasó entera con la mirada.
—Pues no lo parece. —Él rodó los ojos.
—Muy bien cariño, que quieres hacer. ¿Te apetece que bailemos?
—Lo que tu quieras.
—¿Como que lo que yo quiera?
—Pues eso, siempre es lo que tu quieres. —Me crucé de brazos.
—No, no siempre.
—Ah, ¿no? Dime una sola vez en la que no hayamos hecho lo que tu quieres.
—Alice, si siempre hiciéramos lo que yo quiero ahora mismo tu y yo estaríamos junto a Liam y Sophia en un avión destino a Sidney.
—¿Que quieres decir con eso?
—¿No es obvio? Si hubiera sido por mi tú y yo estaríamos ya casados, eso es lo que quiero.
—¿Y por qué no me lo has pedido?
—Porque me dijiste que querías que las cosas surgieran. Yo no tengo ningún problema es esperar a que estés preparada pero... Eso no quita que me muera de las ganas.
—Casemonos, ahora.
—¿Como que ahora? No hay ningún cura por aquí, ¿o si?
—En Las Vegas. Después tendremos tiempo de hacerlo por la iglesia. ¿Que dices?
—¿En Las Vegas?
—El dinero no es un problema, recuérdalo. —Hice una pausa. —Si de verdad quieres hacerlo, este es el momento.
—Pretendes que nos escapemos juntos a Las Vegas y nos casemos. —Afirmó.
—Exacto, ser un poco más romántico no te mataría y esto es idóneo.
—No hay más que hablar entonces. —Me cogió la mano y me condujo hasta la salida.

Narra Babi

Estaba entretenida hablando con Eleanor mientras Lou se espantaba la borrachera en la piscina. En realidad se había caído y ahora no había quién lo sacara.
—Miigrargme. Soyg un pato. —Dijo riendo.
—Te vas a ahogar. —Dijo Els.
—Dame la gmano mi amog. —Dijo Lou, y Els, que es tonta se la dió. Resumiendo, que Lou encontró a un amigo pato.
—Serás idiota. Adiós vestido, adiós maquille y adiós todo. —Se quejó Els.
—Tampoco teg hara falta. —Dijo Lou y la besó.
Ya estaba sobrando ahí. Comencé a buscar a Harry entre la poca gente que quedaba en la fiesta. Seguramente se haya tomado la mitad del minibar, y esté por ahí tirado. Lo ví en la azotea. Estaba apoyado, tomando el aire.
Ví una sombra detrás de él. Una chica. Cara. ¿Que cojones hacia esta guarra en mi casa?
Pasó los brazos por el cuello de MI novio y comenzó a jugar con sus rulos. Se fue acercando poco a poco a él, hasta que lo besó. Y yo allí, como una idiota, mirándolo todo.
No sabía como reaccionar ante esto. Matarlo a el, matarla a ella, matarlos a los dos o matarme a mi. Cualquiera de esas opciones valdría.
No se van a burlar de mi. Subí las escaleras decidida a romperles la cara a ambos. Abrí la puerta de par en par y encontré a Harry intentando quitarse de encima a Cara, aunque su cogorza no lo ayudaba demasiado.
—Esag ges Babi, nog tú. —Dijo Harry al verme. —Ven cagiñog. —Se calló en la cama.
—Eres una zorra. —Dije.
—¿Perdona? Si Harry me ha besado es porque él así lo ha querido. Quizás aún siga enamorado de mi.
—Ya, pues yo creo que no. Lárgate de mi casa.
—Yo de ti me relajaría.
—Y yo de ti no discutiria con alguien que puede arrancarte las extensiones.
Me miró con aires de superioridad y terminó por irse. Respire hondo y miré a Harry. ¿Que se supone que debía hacer? ¿Enfadarme con él? Si no creo que sepa siquiera dónde está.
—Babi. —Lo escuché decir.
—Que.
—Te amo.
No respondi a eso. Pedí que terminaran de echar a la gente de la fiesta y me metí en el baño y comencé a desvestirme. Ví aquella H en mi abdomen a través del espejo. ¿Me habría equivocado?
Después de todo alomejor Harry no es el indicado. Tenía que descubrirlo.
Quizás la mejor forma de hacerlo sería marchandome durante un tiempo, ordenando mis ideas... ¿No?
Cogí una camiseta de Harry, me la puse y me acosté junto a el, pero dándole la espalda.
Poco después lo sentí más cerca de mi. Su respiración se trasladó a mi cuello y su brazo alrededor de mi cintura. Me gire, quedando frente a él.
—¿Por que has tenido que estropearlo todo, Harry? —Pregunté, consciente de que no me escuchaba.
Bese la comisura de sus labios y me refugie en su pecho. Quería dormir abrazada a él, aunque sólo fuera por una noche más.

(...)

lunes, 19 de mayo de 2014

Capítulo 69. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Liam

Comenzó a sonar la música que le daba entrada a Sophia. Me giré rápidamente y la vi, con un vestido precioso, palabra de honor y con adornos plateados en la parte superior. El velo era larguísimo. Y ella hermosa. Venía del brazo de Zayn.
Una vez llegó hasta mi, Zayn me dió un abrazo y se fue a sentarse con Amber.
—Eres la novia más guapa del mundo. —Dije.
—Si, ya lo sé. —Dijo riendo. —Tenía que estar a la altura del novio...
Me agarró del brazo y caminamos hasta quedar frente al cura. La verdad, pensé que este hombre no se callaria nunca. Me pensé varias veces lo de meterle un calcetín en la boca.
Varios lustros después, los padrinos y testigos firmaron y aquel hombre dijo lo que yo estaba deseando de escuchar.
—Liam James Payne, ¿aceptas como esposa a Sophia Lucie Horan para amarla durante el resto de tu vida?
—Si.—Dije poniéndole el anillo a Sophia.
—Sophia Lucie Horan, ¿aceptas como esposo a Liam James Payne para amarlo durante el resto de tu vida?
—Si. —Respondio sonriendo e imitó mi acción.
—Yo es declaro marido y mujer, puede besar a la... Si, lo que está haciendo. —Dijo, ya que nisiquiera le dejé acabar la frase cuando la besé.
Todo el mundo estalló en aplausos y hurras.
—Eres mía. —Dije.
—Y tú eres mío.
—Felicidades chicos. —Dijo Niall.
Estuvimos recibiendo las felicitaciones de todos durante un buen rato. Más tarde, después de que nos bañaran en pétalos de rosa y arroz blanco, nos montamos en el coche. La celebración será en el jardín de la casa Styles, que es como una cuarta parte de Central Park.

Narra Harry

—Todo a salido bastante bien, ¿verdad? —Dijo Babi.
—Pues sí. Ha sido una boda hermosa, y aún queda lo mejor. —Levante ambas cejas.
—Ni se te ocurra beber, después quién te aguanta.
—Tendrás que aguantarme tú. —La besé rápidamente y bajé las escaleras de casa. Ya todos estaban en el jardín.
Iba caminando tan tranquilo cuando, a lo lejos, junto a la piscina, ví una cabellera rubia que me resultaba muy familiar.
—Harry.
—Hola, Cara.
—¿No me digas que eres amigo de los novios? —Me besó la mejilla.
—Pues sí, esta es mi casa.
—Ah, no lo sabía, lo siento. —Dijo riendo. —Me invitó Liam, somos viejos amigos. ¿Y tu novia?
—Está dentro, saldrá en unos minutos.
—Reservame un baile. —Me guiño el ojo y se marchó.
Miré a mi alrededor, esperando que Babi no estuviera por ahí. Gracias a dios tuve suerte. Iba a buscar una cerveza cuando la ví salir al jardín. Se había dejado el pelo suelto, igual que en la boda de nuestros padres.
Una sonrisa se extendió en mi rostro al recordar aquello. Babi no me soportaba, y yo a ella tampoco mucho. Aunque creo que ya me gustaba.
Me saludó con la mano y yo le hice un gesto para que se acercara.
—Tú y tu manía de soltarte el pelo en las bodas. —Dije riendo y la besé.
—Me siento más cómoda así. —Miró mi cerveza. —¿Ya empezamos?
—Tengo que coger la pea lo antes posible, así se me pasará lo antes posible y tu y yo tendremos una noche de bodas entretenida.
—Uno, no hace falta que te cojas ninguna "pea". Dos, no nos hemos casado, con que no es nuestra noche de bodas.
—¿Tres?
—No hay tres. No te pases con el alchol. —Miro a la pista de baile improvisada. —Quiero bailar, vamos.

Narra Zayn

Esto de ser padrino es agotador. Lo único que me apetecía era llevarme a casa a Amber y comermela. Ese vestido y ese cuerpo no pueden ser legales. Cuándo porfin pude quitarme de encima a varios pesados, comencé a buscarla entre la gente.
En la pista sólo estaban Liam y Sophia, comiéndose la boca, literalmente. También estaban Harry y Babi, bailando más tranquilamente.
En el mini bar estaban Lou y Niall, y más a la derecha las chicas, entre ellas Amber.
Caminé hasta allí con paso firme. La cogí en brazos y la besé.
—¿Que haces? Bajame anda. —Dijo riendo.
—A esto me refería yo. Amber, Babi y Sophia tienen suerte, sus chicos son románticos. Los nuestros.. Enfin. —Dijo Alice señalando a Lou y Niall, que discutian sobre fútbol.
—Tampoco será para tanto. —Dijo Amber.
—Hacerles ojitos, en cuestion de segundos los tendreis comiendo de vuestra mano. —Les aconseje. —Si me disculpan, señoritas. —Le di una vuelta a Amber y me la llevé de la mano.
—¿A donde vamos?
—¿A donde quieres ir?
—No me importa, si tú vienes conmigo.
—Entonces no tienes de que preocuparte. —Le besé la punta de la nariz.

(...)

Capítulo 68. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Liam

Me miré al espejo de la habitación de "Zamber" y me acomode bien la cobarta. Apenas podía creer que este día ya hubiera llegado.
—Hey. —Dijo Zayn.
—Hola hermano. Wow, Amber se ha lucido. —Dije mirando su traje.
—Ya veo que Sophia también. —Ambos nos reímos. —No seríamos nada sin ellas.
—Lo cierto es que no. —Sonreí. —Recuerda que eres el padrino, tienes que pasarte a recogerla.
—¿Quién es la madrina?
—Alice. —El timbre nos interrumpió.
—Yo voy. —Dijo.
Me puse el reloj de pulsera, me eché un poco de perfume y bajé las escaleras. Todos los chicos estaban allí, incluido Louis.
—Has venido. —Lo abracé.
—No podía perderme esto por nada del mundo. —Respondió sonriendo. —Liam Payne, casándose. A donde vamos a llegar...
—Choca. —Dijo Harry, a lo que yo rodé los ojos.
—Os dije que terminaría casandome con Sophia.
—A mi nunca me lo has dicho. —Dijo Niall cruzado de brazos.
—Bueno... Pero porque tú eres... Un caso aparte. Supongo. Creo que deberíamos irnos ya. —Dije. Niall me miró con ojos asesinos.
—Aún puedo arrepentirme y obligar a mi hermana a mudarse a Mullingar, lo sabes, ¿cierto?
—Cierto, pero también sé que me tienes mucho cariño y no lo harás. ¿Verdad?
—Verdad. —Palmeo mi espalda.—Quién la aguanta luego...

Narra Amber

Para cuando termine de maquillarme eran las 13:15. Aún teniamos tiempo ya que Sophia no pensaba salir de casa hasta las 14:15, y sin novia no hay boda.
Llevaba puesto un top negro liso y justo en la mitad del abdomen una falda rosa palo, con un poco de vuelo, que me llegaba por la mitad del muslo. Daba la sensación de que llevaba un vestido. Sabía que me arrepentiria más tarde, aún así decidí ponerme unos taconazos negros. Zayn tendría que cargar conmigo después. Deje mi pelo suelto, en mi ondulado natural.
En la cara me puse una base escasa de maquillaje, y un poco de polvos rosados en ambas mejillas, para dar color. En los ojos, me di una sombra negra con toques rosas y alguna que otra brillantina, además me hice la raya de arriba con el eye line. Me puse un poco de brillo rosado en los labios y listo.
¿Lista nena? Zx
Mensaje de Zayn. Seguramente los chicos ya estarían de camino a la iglesia.
—Pues si. PD: Llevo unos 14 cm de tacón. #ineedhelp Ax
—Pues estoy deseando ver como has quedado;). PD: Tienes un billete de vuelta a casa en mi hombro. #don'tworry
—Estoy fabulous. PDPD: Lo tomaré en cuenta. #myhero
—No lo dudo, sólo quiero comprobarlo... ;). PDPDPD: Te amo.
—Te amo más <3

—Amber. Suelta el móvil anda, necesito ayuda con la cremallera del vestido. —Dijo Alice.
—Lo siento, hablaba con Zayn. —Subí la cremallera.
—Grache. ¿Están ya en la iglesia?
—La verdad es que no le he preguntado. Hablábamos de estupideces.
—¿Eiza se queda con tus hermanos esta noche, no? —Preguntó con una sonrisa pervertida.
—Sé lo que estás pensado, y no. —Me reí.
—No por tu parte, porque si le preguntaran a Zayn estoy segura de que diría que si, que quiere una noche loca.
—Alice. —La regañe riendo.
—¿Qué? Sólo digo la verdad. Y no sólo Zayn, todos dirían lo mismo. Los chicos solamente piensan en eso.
—Lo mío con Zayn no es sólo algo físico, es amor, sentimientos...
—Siento lo mismo con Niall, pero no estoy completamente segura de que el también lo sienta... —Solto un suspiro. —Sera mejor que bajemos.

Narra Sophia

Ya estaba todo preparado para salir. Estaba feliz, muy feliz. Y pensar que yo he cazado a Liam Payne... Quién lo diría.
—Hola. —Dijo Zayn. Estaba tan ensimismada en mi vestido que nisiquiera lo escuché llegar. —Wow, estás preciosa. Liam se va a morir.
—Es lo que pretendo. —Dije riendo.
—De hecho todas estáis preciosas pero... ¿Dónde está Amber?
—Aquí. —Dijo bajando las escaleras.
Miré a Zayn. Si no cerraba la boca LA se vería afectado por un tsunami de babas en cualquier momento. —Que guapo.
Malik le susurró algo en el oído a Amber y esta le dió un tortazo mientras reía.
—Haber, tortolitos, os recuerdo que tengo una boda que realizar, los mimitos para luego. —Dije riendo.

(...)

lunes, 12 de mayo de 2014

Capítulo 67. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Babi

Estaba bastante nerviosa. Estaba con Harry, a punto de entrar a la sala dónde me tatuaria.
—Tranquila, ya verás que no es para tanto. Además, según lo que me has dicho el tatuaje es pequeño, ¿no? —Acaricio mi muslo.
—Pues si...
—Mejor entonces, menos tiempo tardarán en hacertelo. Relájate.
Cinco minutos después estaba tumbada en aquella camilla, con Harry a mi lado. Él tatuador era un hombre de unos 38-40 años. Estaba completamente lleno de tatuajes.
—¿Primeriza?—Me pregunto.
—Eh... Si. —Respondi.
—Bueno, veo que tu novio no lo es. —Dijo al ver los tatuajes de Harry. —Ya te habrá contado que no es tan malo como parece.
—Algo me ha dicho... Aún así, me da verdadero pánico.
—Babi, relájate. Yo estaré aquí. Si te duele lo único que tienes que hacer es apretar mi mano todo lo fuerte que puedas. —Dijo Harry.
—¿Te tranquilizaria que fuese tu novio quién te tatue? —Pregunto el hombre. Yo me quedé mirándolo durante unos segundos. Al final asenti. ¿Styles sabe hacer tatuajes? —¿Que dices chico?
—No lo sé. No creo que pueda.
—Puedes intentarlo, yo te ayudare.
Harry se quedó pensativo.
—¿Quieres que lo haga yo? —Me preguntó.
—Sólo si tu quieres. —Dije.
—Está bien, yo mismo lo haré. No te haré daño princesa, tranquila. —Asenti.
—¿Dónde quieres el tatuaje? —Preguntó el hombre.
—En la parte inferior izquierda del abdomen.
—Y ¿tienes claro que tatuaje quieres hacerte? Porque sino puedo enseñarte varios.
—No, no es necesario. Lo tengo más que claro. —Miré a Harry. —Quiero una "H" mayúscula.
—¿"H"? —Preguntó Styles sonriendo.
—Pues si..
—Muy bien, pongamonos a ello. Chico, ¿cuál es tu nombre?
—Harry.
—Entiendo. —Puso una sonrisa un tanto perversa. —Ven aquí. Yo haré la plantilla, eso no te dolerá. Después tu novio será quien se encargue de colorearla con la aguja. ¿De acuerdo? —Asentí.
Así lo hizo. Primero dibujó una H en un extraño papel. Una vez lista, echó un líquido sobre mi piel y le entregó la aguja a Harry. Estaba temblando.
—Si te duele dímelo y parare, ¿vale? —Me pidió
—Tranquilo, sólo hazlo. Confío en ti.
Él tragó saliva y acercó la aguja a mi piel. Me extremeci al notar atravesarla. El sonido de la maquina se hizo presente y la aguja comenzo a moverse. Mire a Harry, estaba totalmente concentrado en lo suyo. Cerré los ojos cuando sentí la aguja más profunda en mi piel.
Sabía que Harry intentaría no hacerme ningún daño, pero tenía miedo.
El hombre le indicaba lo que tenía que hacer y Styles obedecía. Sólo estuve diez minutos allí, dejando a mi novio perforar mi piel con una aguja, pero esos diez minutos parecieron una hora.
—Debes dejartela 48 horas. —Dijo el hombre poniéndome una ghasa sobre el tatuaje, que porcierto, aún ni había visto.
—¿A quedado bien? —Pregunté.
—En este abdomen todo queda bien. —Respondió Mr rulos. —Gracias por esto.
—Gracias a ti, por todo. —Dije sonriendo.
—Porcierto... ¿De que es esa "H"?—Pregunto con una sonrisa cínica.
—De héroe. —Le acaricie la mejilla.

Narra Sophia

Estaba en el salón, ultimado detalles para mañana. No podía creer que en cuestion de unas simples horas uniría mi vida a la de Liam. Y es que, ¿quién lo iba a decir? Desde luego yo nunca me lo habría imaginado.
Unos brazos me rodearon desde la espalda.
—¿Nerviosa?
—Puede que un poco. ¿Tú?
Se encogió de hombros y se dejó caer a mi lado.
—La verdad es que no. Lo que estoy es bastante ansioso.
—Pues comparte. —Me recoste en su torso. —¿Crees que todo saldrá bien mañana?
—Apuesto a que si. Nos hemos esforzado mucho en organizarlo todo, sobretodo tú, que no has parado ni un momento.
—Ya... ¿Has ido a la tintorería a por tu esmoquin?
—Que si. No te preocupes más anda. Está todo perfectamente bien.
—¿Y los zapatos?
—En casa de Zayn, me arreglaré allí mañana. Ni se te ocurra dejarme plantado, eh. Si tardas más de la cuenta si que me pondré nervioso.
—La novia se hace de esperar. —Dije riendo.
—¿Que tal una noche de pre-bodas? —Puso cara de malvado.
—¿Hablas enserio? No. Mañana a las ocho tengo que levantarme para ir a la peluquería.
—Pensé que te ibas a dejar el pelo suelto.
—Iba. No creo que sea el peinado más indicado para una novia, ¿o sí?
—A mi me gusta.
—Eso no importa. —Me reí. Liam me fulmino con la mirada. —Vamos. —Me levanté y tiré -inútilmente- de él. —Mañana nos espera un día duro Payne. —Le regañe.
—Bueeeeno.

Narra Zayn

—¡Zayn, levanta el trasero de la cama. Llevamos dos horas de retraso! —Escuche a Amber gritar. Hice un gesto con la mano para que se callara y le di la vuelta a la almohada. —Zayn. Javadd. Malik. ¡ARMY!
—No tenía ni idea de que fueras tan chillona. —Dije girando sobre mi mismo, quedando así de cara al techo.
—Soy chillona, mandona y agresiva. —Se tiró encima de mi. —Asinque más te vale mover ese culo.
—Ese culo que te encanta. —Nos giré, quedando encima de ella.
—Malik, son las diez. Liam viene en tres cuartos de hora. Tengo que vestir a Eiza, arreglarte a ti, preparar mis cosas, dejar a la niña con mi primo e ir a casa de Sophia. Quita del medio. —Me dió un empujón, que me movió dos centímetros.
—¿Y si nos volvemos a la playa? Quiero olvidarme de que existe el mundo, nena. —Le besé el cuello.
—Zayn, sólo será por hoy. Vamos, date un baño. Mientras preparare las cosas de la niña. —Me besó.

Narra Louis

—Sigo pensando que deberíamos haber avisado. —Dijo Eleanor.
—Hubiéramos estropeado la sorpresa. —Levanté la mano. Un taxi paró frente a nosotros. —¿Vamos a tu casa o a la mía?
—Como quieras. —Nos montamos en el coche.
—Al 36 de Washington Street, porfavor. —Dije.
—¿A que hora es la ceremonia?
—A las 2. Son las once, tenemos tiempo suficiente.
—¿Liam va a vestirse en casa de Zayn?
—Ajá, asinque supongo que Sophia se quedará en la propia. De todas formas mandale un Whatsapp a Babi y confirmalo.
—Ellas tienen mi vestido y zapatos. O deberían... ¿Y si han pensado que no vendría y no lo han comprado? Será mejor que les mande un mensaje.

Narra Babi

Eran las once y media y aún estaba en casa. Me maquille y me puse el vestido para no perder más tiempo.
—Harry, ¿te queda mucho?
—Solo que me pongas la corbata. —Dijo bajando las escaleras. Se puso detrás mía para mirarse al espejo.
—Supongo que los chicos te están esperando. Tardas más que yo, y eso ya es decir. —Dije anudandole la cobarta.
—Tengo que estar perfecto.
—Ni que fueras tú el que se casa.
—Nunca se sabe. —Me guiño el ojo.—Me voy ya, ¿quieres que te acerque a casa de Sophia?
—Si, porfavor.
Estábamos a punto de salir cuando tocaron al timbre. Abrí la puerta, me encontré con Els. No podía creerlo, estaba aquí. La abracé rápidamente.
—Te echaba muchisisisisisisimo de menos. —Dije.
—Yo también. Siento no haber avisado, Lou quería que fuera una sorpresa.
—Iba para casa de Sophia, ella tiene allí tu vestido. ¿Te vienes?
—Els. —Dijo Harry detrás de mi.
—Styles. —Se abrazaron.
—¿Dónde está Lou? Mírate, estás muy guapa. —Le dió una vuelta.
—Gracias. —Dijo riendo. —Louis a ido a casa de Zayn. ¿Como es que aún estás aquí?
—Estaba esperando a que Babi terminara de arreglarse. —Soltó.
—¡Mentiroso! —Le di un golpe, haciéndolo reír.
—Vamonos anda. —Dijo él.

(...)

domingo, 11 de mayo de 2014

Capítulo 66. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Babi

Me miré al espejo. Llevaba una camiseta blanca, con la palabra "LA" en negra, que dejaba ver la mitad de mi abdomen. Dibujé una "H" imaginaria en la parte inferior de este. Definitivamente voy a hacerme ese tatuaje.
Recibí un mensaje de Harry, suplicando que fuera a verle al gym. Me puse unos jeans ajustados, me solté el pelo y salí.
Caminé durante quince minutos hasta que llegué. Y pensar que antes estábamos a tan sólo cinco minutos.
Pregunté por Harry en recepción, me dijeron que estaba haciendo saco con un cliente.
Le ví a lo lejos, estaba hablando con una chica. Él me hizo una señal y yo caminé hasta llegar junto a ellos.
—Te presento a Babi, mi novia. —Dijo y me besó la comisura de los labios.
—Soy Cara, su ex novia. —Dijo con una sonrisa triunfante, cosa que no entiendo. El presente manda cariño.
—Hola. —Hice un gesto con la mano y miré a Harry. —¿He llegado en mal momento?
—En realidad no, has llegado justo a tiempo. Estaba con Mike y ya se ha marchado conque tenemos la tarde libre.
—Bueno, tengo que marcharme. Estaré aquí durante toda la semana, tengo sesión de fotos de ropa deportiva, ya nos veremos. De todas formas... Toma. —Le entregó a Harry una tarjeta. —Es mi nuevo número. —Le sonrió. —Adiós, Babi.
—Adiós. —Gruñi. —Para esto mejor me quedo en casa. —Dije una vez  se había largado.
—Ey, no seas así Babi. No sabía que estaría aquí. Es una amiga y tenía que saludarla.
—Bueno, da igual. Olvidalo.
—Yo lo olvidaré, la cuestión es; ¿podrás hacerlo tú?
—Lo superare. ¿Puedes salir ya?
—¿Tienes prisa?
—Si, quiero que me acompañes a un sitio.
—¿A dónde?—Se apoyó en el rin y me colocó entre sus piernas. Puso los brazos alrededor de mi cintura.
—A la tienda de tatuajes. Me ha costado año y pico pero alfin me he decidido. —Dije jugando con sus dedos.
—¿Y que te vas a hacer?
—Eso no te incumbe. —Me giré, quedando frente a el. —Ya lo verás, cotilla. —Algo detras de Harry me llamó la atencion. Mire en esa dirección y me encontré con Cara, mirándonos atentamente. —Tu amiguita nos está mirando sin perder detalle.—Solté.
—No es mi amiguita. Y me da igual, que mire lo que quiera. —Me robó un beso.
—Eres un ladrón. —Dije acariciando su pecho desnudo. Apenas llevaba unos shorts deportivos.
—Lo sé. —Se encogió de hombros. —Tu también.
—Lo sé. —Me reí.
—De verdad Babi. —Me acaricio la mejilla suavemente. —Te amo.—Me abrazó.
—Yo más.—Le besé el cuello.
—Para. —Apretó mi trasero.
—¿O qué? —Mordi el lóbulo de su oreja.
—O iremos a mi vestuario particular y me las pagarás. —Acarició mi espalda baja.
—Suena muy tentador, pero no. Recuerda que tenemos que ir a lo del tatuaje. Vamos. —Tire de él.
—¿De verdad vas a dejar que una aguja atraviese tu piel?
—Tú lo has hecho. —Señale su torso.
—Pero es diferente, tu eres... Inocente. Una chica buena.
—Pues seré una chica buena pero aguantare esa aguja como si fuera una mala. Y supongo que tú estarás conmigo.
—Que si, tonta.

Narra Alice

Estaba haciendo el vago con Niall en el sofá. No habíamos hecho nada en todo el día, a parte de estar tumbados, aún así estábamos terriblemente cansados. Creo que se me estan pegando los malos hábitos de este cabezón.
—Alice...
—¿Que?
—¿Crees que deberíamos avanzar un paso más en nuestra relación?
—¿Como?
—Haber, Lou y Els tienen a Troy y se han marchado juntos. Sophia y Liam se van a casar el sábado. Amber y Zayn estan comprometidos, y tienen a la niña. Harry y Babi están buscando un bebé y no creo que tarden mucho en encontrarlo. Nosotros estamos estancados en un noviazgo.
—Entiendo. ¿Y eso te preocupa?
—Si... Es como que nos quedamos atrás de todo.
—Ten en cuenta que los demás llevan mas tiempo juntos. Nosotros hemos estado separados por un año Nialler.
—Pero nos amamos desde hace más de una década, y hasta ahora ese sentimiento no ha cambiado. Ha sobrevivido a todo.
—No sé... No quiero precipitarme a nada y que después salga mal Niall. Algún día tendremos que hacerlo pero de momento dejemos que las cosas simplemente surjan. Démosle tiempo al tiempo, ¿te parece?
—Está bien.

(...)

sábado, 10 de mayo de 2014

Capítulo 65. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Amber

Estaba en el salón, engullendo helado de chocolate y vainilla mientras veía "A Walk To Remember". Ya había gastado cuatro paquetes enteros de pañuelos.
Iba a por más helado cuando escuché el timbre. Mis pintas no eran las mejores.
Camiseta de tirantes negra de Zack, shorts de deporte blancos y pantuflas de conejitos. Logan estaba arriba, invadiendo el espacio vital de Eiza y los chicos no estaban, asinque, me tocó a mi abrir.
—¿Podemos hablar? —Zayn.
Me entraron ganas de darle con la puerta en las narices, pero me contuve. ¿A quién quería engañar? Le necesitaba, y si no aprovechaba esta oportunidad seguramente no volveria a tener ninguna otra.
Me crucé de brazos y asenti, sin mirarlo directamente.
—¿Puedes salir?
—Supongo. —Dije y me deje guiar hasta su coche.
Nos montamos en él y lo puso en marcha. No tenía ni la menor idea de a donde me llevaba, sólo sé que el camino fue interminable. Incómodo. Ningúno hablaba. Él lo intentó varias veces pero alfinal se quedaba callado. Supongo que no querría estropear la situación.
Dos horas después estábamos en una cabaña, frente a una playa abandonada.
—¿Dónde estamos? —Pregunté.
—Harry me dijo que te trajera a este lugar. Estamos en medio de la nada.
Caminé hasta quedar frente a la orilla del mar. Eran las ocho de la tarde y el sol comenzaba descender.
Zayn se paró a mi lado y se metió las manos en los bolsillos. Estaba pensativo.
—No quiero casarme con Perrie, no la amo. —Dijo de repente. —Te amo a ti, supongo que ya lo sabes...
—Y yo a ti. Es absurdo que tengas celos de Josh, es mi amigo. —Dije mirando al horizonte. No podia mirarlo.
—Será absurdo pero no puedo evitarlo. Los celos forman parte de las relaciones.
—Y de las rupturas.
—Según yo no hemos roto. No quiero romper contigo, no me arrepiento de nada de lo que hemos hecho juntos.
—¿Ni de Eiza?
—De Eiza menos. Es un lazo irrompible entre los dos, un lazo que, queramos o no, siempre nos va a mantener unidos.
—Lo sé.
Ambos nos quedamos en silencio.
—No sé que decirte, Amber.
—Ni yo. —Suspire. —Despues de todo puede que nuestra relación si esté acabada. Por mucho amor que sintamos el uno por el otro... No es suficiente.
—Pues si esto no es suficiente no sé que lo será... El problema es que ningúno quiere dar el primer paso.
—Puede ser. —Lo miré.
—Si, puede ser. —Me miró.
Y así nos quedamos, mirándonos mutuamente, en absoluto silencio. Lo único que se escuchaba era el sonido del mar. Cerré los ojos durante un segundo, cuando volví a abrirlos me encontré a Zayn a menos de 3 centímetros de distancia.
—Pues entonces mejor no decimos nada. —Dijo y me besó.
Me quedé un poco sorprendida, pero le respondí inmediatamente.
Poco tiempo después estaba tumbada en la arena de la playa, con Zayn encima, haciéndome suya, susurrandome cosas hermosas en el oído.
Ni siquiera sé como llegué a esa situación, sólo supe que no quería pararla.
Me quedé dormida entre sus brazos poco después.
Para cuándo desperté ya estaba medianamente vestida. Zayn me había puesto su camisa. Le miré, me tenía agarrada por la cintura, la cabeza apoyada sobre la mía. Estábamos dentro de aquella cabaña, en una cama. Miré la hora, las seis de la mañana.
Me levanté de la cama y salí a despejar mis ideas. La playa estaba vacía, como ayer. Lo que era muy relajante, sabes que nadie va a venir a molestarte.
Una vez más llegué a la orilla y me senté casi al borde de esta. ¿Que pasaría ahora? Si, habíamos hecho el amor, pero aún ni siquiera habíamos solucionado nuestra situación.
Me quedé viendo como las olas rompían en la orilla mientras pensaba y pensaba. Estaba muy rallada con el tema.
Noté una mano en mi hombro, un beso en mi frente y alguien sentándose junto a mi.
—Hola. —Dijo.
—Hola...
—¿Estás bien?
—No, la verdad.
—Si es por lo de anoche...
—Lo de anoche fue perfecto. —Le corté. —La cuestion es que seguimos en las mismas Zayn, al menos por mi parte.
—Solo olvidalo. Porfavor. —Me besó el hombro.
—No sé si pueda. Me gustaria que habláramos sin ningún preámbulo el uno con el otro.
—Está bien. La verdad es que fuí el idiota de los idiotas. Te amo más de lo que me gustaria, me encantaría estar contigo siempre, casado o no. Incluso tener más hijos. Todo lo que quieras, todo, estoy dispuesto a dartelo Amber. Dije lo de Perrie más que nada para molestarte, para que sintieras un poco lo que sentía yo.
—Yo sin embargo lo de Josh lo dije como una broma. Lo demás me fue saliendo sólo. Y no creo que seas un cobarde. Ni quiero verte con Perrie. No quiero verte con nadie que no sea yo.
—Te prometo que no lo harás. —Me cogió la mano y volvió a dejar allí el anillo.
—Tomaré en cuenta la promesa. —Él sonrió. Puso la mano en mi mejilla y me besó.

(...)

jueves, 8 de mayo de 2014

Capítulo 64. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Zayn

¿Quiere que me case con Perrie? Pues eso haré, casarme con Perrie. Para cuándo llegué a casa, ni las cosas de Amber ni las de la niña estaban allí. Maldije mentalmente. Quizás esto haya ido demasiado lejos... Yo la amo a ella, no a Perrie...

—¿Sabes qué? Tienes razón. —Se quitó el anillo y lo dejó en la mesa—Quizás quieras terminar lo que empezaste hace dos años. Lo de casarte con Perrie, digo. Puedes dárselo a ella.
—Puede que si que quiera.
—Bien, eres libre, hazlo, si es que no vuelves a arrepentirte como un cobarde.

¿Cobarde? Parece que no me conoce. Cogí mi móvil y marqué el número de mi padre. Hacia muchísimo tiempo que no hablaba con él...
—¿Papá?
—¿Zayn? ¿Eres tú?
—Si, soy yo. ¿Aún tienes el número de Perrie Edwards?

Narra Sophia

Todos nos quedamos pillados después de ver aquella escena. Dios mío, otra vez no.
—¿Que acaba de pasar? —Preguntó Babi.
—Ni idea... —Murmuró Liam.
—Tengo que hablar con Amber. —Dijo Babi. —Hablamos luego. —Besó a Harry y se marchó.
—¿Iba enserio con lo de Perrie? —Preguntó Niall.
—No creo que sea tan tonto como para tropezar dos veces con la misma piedra... ¿Verdad? —Dijo Liam.
—Es Zayn. Es tonto para eso y para más. —Dijo Harry. —Pero si hace un rato estaba venerando a Amber, ¿como ha sucedido esto?

Narra Babi

Supuse que Amber se habría marchado a su casa, asinque pedí un taxi y fuí hasta allí. No me equivique, justamente estaba entrando en su casa con dos maletas.
—Amber. —La llamé.
—Oh, Hola Babi... —Dijo al notar mi presencia. —Pasa.
Entré detrás de ella. Dejó las maletas en un lado del salón y se dejó caer en el sofá.
—¿Cómo estás?
—Desecha. —Dijo y se tapó la cara con ambas manos.
—¿Que ha pasado? —Me senté junto a ella.
—Zayn se ha molestado porque he nombrado a Josh. Eso a dado raíz a una discusión.
—Pero eso es una estupidez. ¿De verdad merece la pena sufrir por eso?
—Preguntale a él. Sacó el tema de Perrie y no pude evitar reclamarle. Ha sido él quién ha dicho que ha sido un error comprometernos. Yo no puedo obligarlo a nada que no quiera.
—Eso lo ha dicho en un momento de cabreo. Tú, el, yo y todo el mundo sabemos que no es lo que realmente siente. El está enamorado de ti, por dios.
—Eso ya no importa. Se va a casar con Perrie.
—¿Cómo lo sabes?
—Porque lo he llamado cobarde. Él no soporta que le digan eso... Ya no hay vuelta atrás.
—¿Y si lo sabías para que se lo has dicho? Lo único que has hecho a sido empeorar las cosas.
—Exacto. Quería molestarlo. —Soltó un suspiro. —Lo más absurdo de todo es que esta mañana me a ha suplicado prácticamente que me quedara con él, que tenía un mal presentimiento... Si le hubiera hecho caso... Ahora estaríamos juntos, en casa y nada de esto habría pasado.
—Aún puedes arreglarlo, con un simple mensaje. O una simple llamada.
—Que me llame él.
—Ay dios, porque creaste el orgullo... Es el cáncer de todas las relaciones. Seguramente él esté diciendo lo mismo, "que me llame ella". Sois unos cabezotas...
—Sólo... Abrazame. —Dijo con los ojos aguados.

Narra Liam

Decidí ir a ver como estaban las cosas con Zayn. Llamé al timbre de su casa, abrió la puerta casi de inmediato. Su expresión cambió de emoción a pasotismo en cuanto vio que era yo. Creo que esperaba a otra persona.
—Hola. —Dijo con toda la tranquilidad del mundo.
—¿Esperas a alguien?
—No, pero pensé que igual era A... Nada. Pasa.
—¿Me puedes explicar porque has dejado a Amber?
—¿Porque soy un maldito imbécil? Supongo que esa es una de las razones.
—Valla, al menos lo admites. ¿Que piensas hacer?
—Casarme con Perrie.
—¿Qué? Zayn, tú no quieres eso.
—No, pero Amber al parecer si.
—¿Estás mal? ¿Cómo va a querer que te cases con otra? Pareces subnormal, de verdad.
—No me importa. Lo haré de todas formas.
—Bien, es tu vida, jodetela si es eso lo que te apetece. Pero ambos sabemos que tú no quieres casarte con esa mujer, y si lo haces te divorciaras al tercer día... —Hice una pausa. —Toma mi consejo, ve a por Amber y llevatela. Al campo, a la playa... A dónde quieras, pero que estéis solos. Hablar el tema y solucionarlo. No la dejes ir.
—Ella también podría preocuparse un poco, ¿no? Se supone que también me quiere.
—Eres tú el que la ha cagado enfadandote por nada, ella sólo ha respondido. Tú la jodes, tu lo arreglas majo. No puedes pretender tenerla ahí para aguantar cada una de tus absurdeces.
Zayn se quedó callado, mirando a un punto fijo en la pared.
—¿Que vas a hacer? —Insistí.
—Rallamentes. —Bufó. —Voy por ella.

(...)

Capítulo 63. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Babi

Iba entretenida con las chicas. Habíamos comprado miles de cosas y llevábamos un montón de bolsas en mano. Decidimos que sería mejor para la salud de nuestros brazos parar un rato y comer algo. Bajabamos por las escaleras mecánicas cuándo vimos a cuatro chicos pasearse con aires de superioridad. Todos y cada uno de ellos llevaban gafas de sol.
—Adivinar quienes son. —Dije.
—No pueden quedarse solos ni un día. —Dijo Sophia.
—Vayamos con ellos, extraño a Niall. —Soltó Alice.
—Tarde de chicas. —Recordó Sophia.
—¿Y que vamos a hacer? ¿Permitir que se paseen por todo el centro comercial? ¿Atrayendo la atención de todas las chicas? —Cuestionó Amber.
—Tienes razón. —Dije.
—Pero tengo hambre. —Se quejó Sophia.
—Yo también. —Dijo Alice. —Vayamos primero a comer.
—Ir tirando, voy a ver a Harry.
Las chicas asintieron y se marcharon. Yo caminé sigilosamente hasta quedar frente a la espalda de Harry.
—Hola guapo, ¿tienes novia?—Dije poniendo un acento indú.
—La verdad s... —Dijo girandose. Sonrió al ver de quién se trataba aquella "misteriosa chica". —Umm no, no tengo. ¿Por qué? —Se quitó las
gafas y puso una sonrisa irresistible.
—Pensé que quizás te apetecería salir algún día de estos, o alguna noche. —Dije haciendo pequeños tirabuzones en mi pelo.
—Cuenta con ello preciosa. —Me guiño el ojo. Le agarre por el cuello de la camisa y lo besé. —Eres rápida, me gusta.
—Enserio. —Dije riendo. —¿Que hacéis aquí? Pensé que estaríais en casa de Liam.
—Lo cierto es que no nos fiamos de ningúno de los chicos que hay en el centro comercial. Veníamos a daros una sorpresa. Y a ver que estabais haciendo.
—¿Y que pensabais que os ibais a encontrar?
—Yo tenía la esperanza de encontrarte en algún probador de una tienda de lencería pero ese es un sueño frustrado.
—Harry. —Le di un golpe. —Ni tan frustrado. —Me reí.
—Deberíamos hacerlo realidad...
—Yo lo haría pero muerdo del hambre.
—¿Muerdes? —Dijo sonriendo. Se acercó a mis labios y rozó el inferior lentamente. Fuí a darle un mordisco pero él se me adelantó.
—Ey. —Me queje. Styles soltó una risilla.
—¿Dónde quieres comer? —Cogió las bolsas con su mano derecha y me agarró de la cintura con la izquerda.
—Las chicas están en aquél italiano. Avisa a los chicos y vamos para allá.
—Ellos decían de ir al burguer king, espero que no estén allí ya. —Dijo y apartó su mano de mi para coger el teléfono. Tecleó unas cuantas palabras en él y volvió a guardarse el móvil. —Ya vienen.
—¿Por qué gafas de sol? —Pregunté levantado una ceja.
—Para parecer malotes.
—Ya sois malotes. —Agarré su brazo.
—No quieras saber cuanto nena. —Dijo y yo me reí.
—Tú y tu doble sentido.

Narra Amber

Alice y yo cogimos mesa mientras que Sophia se encargó de pedir las bebidas. Alguien me tapó los ojos sin previo aviso.
—¿Quién soy? —Dijo alguien finjiendo voz aguda.
Sus manos eran grandes, suaves pero con un toque rasposo. Unas manos de hombre.
—¿Josh? —Me hice la tonta.
—Zayn. —Gruñó y se sentó a mi lado.
—Anda, Zayn, no me había dado cuenta de que eras tú. Lo siento. —Sarcasmo, sarcasmo, sarcasmo. Él hizo una mueca y se removió en el asiento. Corto, corto, corto.  —Recuérdame que luego te de una clase sobre que es el sarcasmo.
—Me molesta que aún te acuerdes de ese tío. —Dijo mirando la mesa.
—No quiero discutir, y menos aquí.
Miré a mi alrededor, ya todos estaban sentados junto a nosotros, hablando animadamente. Ni siquiera los ví llegar.
—Yo tampoco quería discutir.
Le lancé una mirada asesina y él me la respondió.
—Eres como un bebé. Bueno, no, no eres como un bebé, tú hija es más madura que tú. —Dije mirándome las uñas.
—¿Tu hubiera gustado el que te hubiera nombrado a Perrie?
—Eso es diferente. Yo no te dejé tirado para casarme con Josh. Tú sí.
—¿Enserio quieres hacer esto?
—Tú has empezado. —Me encogi de hombros.
—Mira, Amber... —Soltó un suspiro. —Mejor dejémoslo estar.
—No, hablemos. Hablar es bueno, ¿verdad?
—Está bien, hablemos. ¿Quieres que te diga lo que pienso? Después de todo puede que no haya sido tan buena idea lo de ese anillo. —Dijo Zayn y se puso en pie. Todos en el restaurante se giraron a vernos.
—¿Sabes qué? Tienes razón. —Me lo quité y lo puse sobre la mesa. —Quizás quieras terminar lo que empezaste hace dos años. Lo de casarte con Perrie, digo. Puedes dárselo a ella.
—Puede que si que quiera.
—Bien, eres libre, hazlo, si es que no vuelves a arrepentirte como un cobarde. —Cogí mis cosas y salí de allí.

(...)

miércoles, 7 de mayo de 2014

Capítulo 62. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Niall

Abrí los ojos poco a poco. Miré a Alice, que una vez más, estaba recostada en mi pecho, desnuda. Ahora vivimos juntos, en mi casa. Es la mejor decisión que he tomado en mi vida.
Comencé a darle besos por toda la cara. Ella hizo una mueca.
—Nialler. —Dijo en tono acusador.
—Buenos días. —Le besé la frente.
—¿Que hora es?
—Las once y cuarto. Me dijiste que habías quedado con las chicas a las doce, para comprar no se que cosas para la boda de Liam.
—Es cierto. Me había olvidado completamente. —Se levantó enrollada en las sábanas y entró en el baño.
—¿Vas a la ducha? —Pregunté.
—Si—Grito.
—Esperame, que voy contigo.

Narra Sophia

—¿A dónde vas? —Pregunto Liam.
—Al centro comercial. Día de chicas.
—En ese caso... Supongo que no estaría mal hacer un día de chicos... —Dijo con sonrisa malvada.
—Mientras la casa no sufra daños... Tenéis luz verde. Pero compartaos eh. Que nos conocemos.
—Que si tonta. —Me besó. —Nos vemos esta tarde, o esta noche... —Me guiño el ojo.
—Pervertido. —Reí.
—Si necesitáis algo llamarme a mi, o a cualquiera de los chicos. Total, estaremos todos juntos.
—Vale. Bye, te amo. —Cerré la puerta y caminé hacia la casa de "Habi". Esto de tener que caminar tanto cansa.
Antes solamente tenía que cruzar la calle y ya.
Después de media hora de besos y despedidas cursis, conseguí arrancar a Babi de allí. Que dos pegajosos. Continuamos la ruta hasta la que antes era mi casa, a recoger a Alice.
Ya nos llevamos bien. No es que de repente seamos las mejores amigas pero... El tiempo lo soluciona todo.
Media hora más y porfin fuimos a buscar a Amber. En su casa no fue media, fue una hora.
—¿Porfin podemos ir ya al centro comercial?—Pregunté.
—Claro. —Respondieron.
—¿Els vendrá a la boda?—Preguntó Alice.
—Hablé con ella ayer y me dijo que todo dependía del trabajo de Louis. Bueno, y de si su suegra podía ocuparse de Troy. —Respondió Babi.
—Ojalá pueda venir... —Dije.

Narra Harry

Liam me llamó para anunciar que teniamos "tarde de chicos". No iba a ser lo mismo sin Lou, apenas hace una semana que se marchó y lo echo muchísimo de menos. Almenos se que está con la mujer que ama, siendo feliz. Eso me ayuda a superarlo un poco.
Cogí el coche y me dirigí a casa de Liam. Ya todos parecían estar allí.
—Hey hermano, pasa. —Dijo Liam abriendo la puerta.
—Que hay chicos. —Dije entrando en el salón.
Zayn estaba tirado en el sofá con Niall. Liam se sento en un sillon individual y yo imite su acción.
—¿Y Eiza? —Pregunté.
—Con sus tíos. Prácticamente me la han quitado de los brazos. —Respondió Zayn riendo.
—Debe de sentirse genial lo de ser padre, ¿no? —Preguntó Liam.
—No te imaginas cuanto, sobretodo cuándo da la casualidad de que la madre de tu hija es la mujer de tus sueños. —Contestó con una sonrisa en el rostro. —Deberíais animaros.
—Alice y yo de momento estamos bien. Acabamos de volver y no creo que sea el mejor momento para dejarla embaraza, pero seguramente los mini Niall's vengan en un futuro no muy lejano—Dijo Niall.
—Pues yo estoy deseando que Babi llegue y me diga que está embaraza de nuevo. —Dije.
—Conociendote como te conozco supongo que no tardará mucho. —Dijo Liam y todos reímos. —Pues yo... Bueno, no estoy buscando ningún bebé pero tampoco lo estoy evitando. Si llega, bienvenido sea.
—Echo de menos a Alice. —Dijo Niall con un mohin.
—Y yo a Babi.
—¿Y pensáis que nosotros no? Estoy acostumbrado a pasar todo el día con Sophia. Esto es raro. —Admitió Liam.
—Es el bichito del amor. Cuándo te pica, te pica. Y conmigo se ha cebado. —Dijo Zayn.
—La verdad es que se ha cebado con todos, hasta con Lou. —Dijo Niall.
—¿Sabéis que? Deberíamos ir al centro comercial, darle una sorpresa a las chicas. —Dije.
—Tienes razón. Además, tenemos que dejarle claro a TODOS los imbéciles que quieran entrarles que tienen novio. Y que somos nosotros. —Dijo Liam levantándose del sofá. Todos lo imitamos.
—¿A que estamos esperando? —Pregunto Zayn.

(...)

martes, 6 de mayo de 2014

Capítulo 61. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Zayn

Amber me miraba con cara de cabreada. Oh oh. Realmente no sabía que responderle.
—Estoy esperando. —Dijo.
—Um... Nena, yo...
La miré, la miré, la miré, inhale, exhale y lo solté.
—Sabes que no soy demasiado bueno para estas cosas pero... Te compre este anillo esta tarde. Es un anillo de compromiso...
—Anillo d-de... ¿Compromiso?
—Si... Sé que me he precipitado. Soy un tonto. Lo devolvere y...
—¿Que te has precipitado? —Me interrumpió. —Zayn, llevamos un siglo juntos, tenemos una niña. ¿Precipitado? Llevaba mucho tiempo esperando a que te diera la gana de pedírmelo.
—¿Enserio? ¿Quieres?
—Pues claro que quiero imbécil. —Me dió un leve empujón en el hombro.
—En ese caso... —Sonreí. —Supongo que esto es tuyo. —Cogí el anillo y lo puse en su dedo corazón.
—Es... Precioso Zayn. —Me abrazó. —Y tú estás empapado. —Cogió a Eiza.
—Creo que me merezco algo más que un abrazo por esto.
—Voy a acostar a la niña. —Dijo riendo.
Creo que esa había sido la proposición menos romántica de la historia. Aún así había aceptado y eso me dejaba saber como de enamorada está esta preciosa mujer de mi. De un imbécil que no la merece...
Aproveché mientras Amber no estaba para esparcir algunos pétalos de rosa por la cama. Puse unas velas alrededor de la habitación y apagué las luces. Aquel ambiente era muy íntimo. Me di cuenta de que aún estaba en toalla. Me puse unos Jeans oscuros y una camisa blanca.
—¿Que...? —Dijo Amber desconcertada. —¿Que es todo esto?
—Un pequeño detalle para ti. Sé que no es ni la mitad de lo que te mereces pero... Supongo que la intención es lo que cuenta... —Me encogi de hombros.
—Creo que es de lo más romántico que has hecho por mi Malik. —Dijo sonriendo.
—No soy el tipo más romántico de la historia per...
—¿Que dices? Te recuerdo que has cruzado la mitad del mundo para que estuviéramos juntos. Esto es... —Miró a su alrededor. —Sencillamente perfecto.
—No sé porque estás conmigo, cualquier tipo estaría encantado de tenerte... —Junte nuestras frentes.
—Zayn, no me imagino con nadie que no seas tú. Deja de decir tonterías. —Me besó.
—De verdad princesa, tú y mi niña sois lo único que me importa. —Cerré los ojos. —Te amo tanto que hasta me duele Amber.
Me acarició el pelo y volvió a juntar nuestros labios. Iba a dejarle claro todo lo que siento por ella de la mejor forma que sé...

Narra Babi

—Ya lo hemos hablado Harry. —Dije caminando delante de él.
—Es que... Bailar no es lo mío. Me da vergüenza y además no sé.
—Por eso estamos aquí. Quiero bailar alguna lenta contigo en la boda de So y Liam. Vamos. —Lo cogí de la mano y lo llevé a rastras hasta el salón de baile.
Anthony nos estaba esperando.
—Porfin. —Dijo poniéndose las manos en la cintura. Es todo un personaje, es gay y lo quiero mucho.
—Ya, ya estamos aquí. —Le di un sonoro beso en la mejilla.
—¿No me vas a presentar a ese tiarron? —Dijo mirando a Harry. Este miró hacia todas partes.
—¿Yo? —Pregunto. Me reí y los presenté. Anthony le dió dos besos en ambas mejillas, lo que dejó un poco descolocado a Styles.
—Bueno chicos, basta de cháchara. Agarrad a vuestras parejas, la clase va a comenzar. —Dijo meneandose por todo el salón.
—¿Cómo me haces esto? —Susurró Harry.
—Sh. —Me reí.
—Ha intentado ligar conmigo.
—Solo estaba bromeando. Él sabe que eres mi hombre, nunca intentaría nada contigo. —Acaricie su pecho a través de la fina tela de su camiseta.
—Pues eso espero. No me van los hombres. —Ambos miramos a Anthony, este le hizo ojitos a Harry. —¡Babi!—Se quejó.
—Pareces un niño pequeño.—Puse sus manos en mi cintura y pasé mis brazos por su cuello. Me apretó a sí y me besó.
—Muy bien, comencemos. Dar un paso hacia delante y otro hacia detrás. No olvidéis mover las caderas al compás—Anunció Anthony.
Comencé a moverme, obligando a Harry seguirme.
—Pareces un palillo. Estás rígido Styles. —Dije.
—Ya te lo he dicho, no quiero bailar. Podríamos estar haciendo cosas más interesantes si estuviéramos en casa.
—Pero estamos aquí. Pon un poco de tu parte porfavor.
—Bárbara cariño, haz que este rulitos sexys mueva el trasero, o lo haré yo. —Dijo Anthony y le dió un azote en el culo.
—¿Me acaba de tocar el trasero? —Preguntó Harry.
—Te lo mereces. Ya le has oído, o te mueves o te dará más azotes. —Respondí riendo. Él rodó los ojos y me sujetó de la cintura. Me hizo girar sobre mi misma para después recogerme en sus brazos. —¿Cuándo has aprendido a hacer eso? —Me incorporé.
—De pequeño mi madre me apuntó a bailes de salón. Si se lo cuentas a alguien te mataré.
—Entonces ¿sabes bailar?
—Si. Pero no lo repitas por ahí.
—Si me lo hubieras dicho ayer no te hubiera traído aquí.
—Ahora ya lo sabes. Vámonos antes de que tú amigo quiera violarme.

(...)

lunes, 5 de mayo de 2014

Capítulo 60. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Sophia

Me di una ducha rápida y me puse un vestido corto, negro, ajustado y con la espalda descubierta. No sé que pretendía Liam pero más vale estar prevenida.
Me maquille lo justo y necesario y bajé. Para entonces, Liam estaba esperándome en la entrada, con un traje negro que moldeaba perfectamente sus abdominales/bíceps. Todo un dios.
—Wow. —Fue lo único que dijo, aunque su expresión ya hablaba por si sola.
—Anda, vámonos.
Nos montamos en el coche y marchamos. Liam me llevó a un restaurante italiano justo en el centro de LA. 
—¿Por qué tanto glamour? —Pregunté.
—Porque es una ocasión especial. —Se limitó a contestar y tiró de mi hasta el interior. Lo notaba nervioso.
Un camarero nos recibió y nos guió hasta la mesa. Estuvo cuchicheando algo con Liam durante unos minutos. Él asintió y se fue.
—¿Y bien? ¿Vas a decirme el porque de esta repentina salida?
—Si, pero aún no.
—¿Cuándo entonces?
El mismo camarero de antes se acercó a la mesa, con una bandeja de colinavos. 
—Enseguida traemos la carta.—Dijo y se marchó de nuevo.
—¿No quieres uno?
—No, la verdad. —Respondí.
—Vamos, están buenos.
—No me apetece comer pan antes de cenar.
—¿Y durante la cena? —Dijo mirándome nervioso.
—Puede ser. ¿Podrías centrarte? Te noto ausente, distraído. Dime que te pasa anda.
—No me pasa nada... ¿Sabes? A mi si que me apetece un piquito de estos.
—No son piquitos Liam.—Rode los ojos.
—Como se llamen. —Cogió uno y se lo comió mientras miraba disimuladamente a los demás. —No es posible.
—¿Que no es posible?
—Nada. —Dijo sacando uno por uno los colinavos.
—Liam, deja de hacer eso.
—Se ha confundido de bandeja... —Gruñó.
—Liam. —Chasquee los dedos, pero seguía ausente. —Cuando decidas hacerme caso me lo dices, paso de estar así contigo. —Me levanté y caminé hasta la salida.
—Espera. —Le oí decir.
—¿Que pasa ahora?
—Que... —Se pasó la mano por el pelo. —Que soy idiota. Te he traído aquí para decirte algo importante y... Lo estoy arruinando todo. —Dijo delante de todo el restaurante.
—Liam...
—No, déjame hablar. Te he traído aquí para pedirte matrimonio y voy yo, con todos mis cojones y pierdo el anillo. Iba a ponertelo en uno de esos piquitos largos, para que tu te lo encontraras fortuitamente...
—Son colinavos, señor. —Dijo el camarero.
—Me la sopla lo que sea. La cuestión es que... Sophia Horan. —Se arrodilló frente a mi. —¿Quieres casarte conmigo? Aunque no tenga una maldito anillo para darte.
Estaba en shock. No sabía que hacer, si besarlo o reirme por lo estúpido que era. ¿Enserio había montado todo esto para pedirme matrimonio?
—Si, quiero. —Dije riendo y lo abracé.
—Creo que he encontrado el anillo. —Dijo un señor al fondo del restaurante.
—Menos mal, me ha costado 2000$ —Dijo.
—Ya entiendo porque estabas tan mal, a ti lo que te escuece es el dinero, campeón. —Dije.
—Bueno, si. Eso y la posibilidad de que dijeras que no. —Cogió el anillo.
—Creo que deberías lavarlo, ya que ha estado de excursión en la boca de ese hombre. —Me reí.
—Aggh.

Narra Amber

Ya casi era la hora de dormir. Estaba con Eiza en la habitación, jugando. Ella señaló un bote de colonia. Era el que Logan le había regalado a Zayn, y el lo odiaba, asinque... Supongo que daba igual si se rompía jugando... ¿No?
Cogí la caja y se la entregué a Eiza. Ella se encargó de abrirla. Sacó un pequeño estuche del interior. Lo miré extrañada y lo abrí. Era un precioso anillo de diamantes.
—Hola princhecha. —Dijo Zayn entrando en la habitación. Se acababa de duchar y solamente traía una toalla alrededor de la cintura. Cogió a Eiza en brazos y le hizo pedorretas en la barriga.
—Zayn... ¿Que se supone que es esto? —Le mostré el anillo. Se le puso la cara de todos los colores.
—Eh... Yo no... Creo que me está sonando el teléfono.
—Tu teléfono está en la mesilla. —Me cruce de brazos. —Habla.

(...)

Capítulo 59. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Harry

Apenas le dieron el alta a Babi, recogí nuestras cosas y me la llevé a casa. La operación la dejó un poco dolorida pero no se trata de nada que no se pueda arreglar con un poco de amor y mimos.
—¿Cama o sofá? —Pregunté.
—Dios, cama no. Estoy agotada de estar tumbada.
—Sofá entonces. —Dije y la llevé en brazos hasta allí.
—Creo que podría acostumbrarme a esto. —Dijo coqueta.
—Yo también, es una muy buena excusa para tenerte todo el día conmigo. —Le guiñe el ojo.
—Eso suena muy bien. —Me besó y yo la correspondi.
Fuí tumbandome encima de ella poco a poco, sin dejar caer todo mi peso encima suya. Dios, quería hacerlo. NECESITABA hacerla mía pero... No podía. Acababa de ser dada de alta y podría hacerle daño. Tenía que parar esto antes de que acabara con mi poco autocontrol.
—Babi... —Ella puso un dedo en mis labios y sacó mi camiseta. —Babi, para, porfavor.
—¿No quieres?—Preguntó dudosa.
—Pues claro que quiero. Pero no puedo nena. Apenas hace una semana desde que te operaron. Podría ser peligroso... —Le acaricie el pelo.
—Harry, me da igual...
—Pero a mi no. —Ahora fuí yo quién la interrumpió. —Si te pasa algo me muero. —La besé suavemente y me quité de encima suya.
—Eres un mandón. —Se quejó y yo sonreí.
—Sólo estoy tomando la revancha. —Le guiñe el ojo.
—Enserio Harry... —Puso sus preciosos ojos en blanco.
—Hablo enserio nena. Puedo soportar cualquier cosa, excepto perderte. —Dije acariciando sus muslos desnudos, dado que llevaba pantalón corto.
—No me perderás. —Juntó nuestras frentes.
—Te vas a enterar de lo que es bueno cuando estés recuperada. —Dije riendo.
—Eso ha sido una... ¿Amenaza?
—Más bien una advertencia. Te adelanto que no saldremos de la cama en todo el día. —Puse una de mis sonrisas pervertidas.
—Bueno... Me parece bien... —Sonrió y la besé.

Narra Zayn

Conduje hasta casa con la cabeza hecha un lío. Miré al asiento del copiloto, allí estaba el anillo que Liam me había hecho comprar. Llamarme lo que queráis, pero el que alguien se ponga a canturrear en medio de una tienda llena de gente "cacaraca gallina" no ayuda a tomar una decisión. Por alguien me refiero a Liam.
Él tenía razón, no estaba para nada preparado para entregárselo a Amber. Me da pavor el sólo pensar que pueda decirme que no.
No sé que me pasa, nunca he sido tan inseguro con nadie...
Cogí aquella bolsa y entre en casa. ¿Dónde la guardo? No quiero que Amber la vea...
Subí las escaleras tal que un ninja y entré en la habitación. Me decidí por guardarlo dentro de la caja del perfume que me regaló Logan por navidad. Amber no soporta el olor asinque no creo que se digne a abrirlo.
—No te he escuchado entrar. —Dijo a mi espalda. Dejé el perfume en su sitio y me giré para verla.
—Quería darte una sorpresa. —La tomé por la cintura.
—¿Que sorpresa? —Preguntó.
—Ummm aún no puedo decírtelo. Pronto te enteraras. —La besé. — ¿Dónde está Eiza?
—Durmiendo.
—Bien... Entonces supongo que tenemos tiempo para estar solos... —Sonreí.
—¿Y la cena...? —Apenas acabó de decir "cena" cuándo la besé de nuevo.
—La tengo frente a mi.
—Pues te aviso de que yo estoy hambrienta.
Me reí y la guié hasta la cama.

Narra Liam

—¿Liam?
—Si, soy yo cariño.
—¿Donde estás? Te estoy esperando para cenar.
—Voy para casa. Hay cambio de planes, cenaremos fuera.
—¿Fuera? Pero si estoy hecha un desastre.
—Estás bien con cualquier cosa que te pongas... O te quites... —Susurré. —Vete arreglando. —Colgué.

(...)

Capítulo 58. SEGUNDA TEMPORADA.

Narra Louis

De nuevo todo está bien. Parece que porfin la vida, el destino o lo que sea nos está dando la oportunidad de ser felices. A Babi la están operando en este instante. Le extilparan el pequeño bulto y la enviarán de nuevo a casa, con Harry.
Liam y Sophia siguen con sus peleas tontas, pero se ve que se aman. Además, Liam está preparandole una gran sorpresa a Sophia.
Niall y Alice... Bueno, esos dos están enamorados del otro hasta los huesos, pero Niall aún no se siente preparado para perdonarla.
Zayn le compró una casa a Amber y viven allí con Eiza. Era de esperarse que acabaran juntos, son el uno para el otro.
Y bueno... Aquí estamos Els y yo, haciendo las maletas. Si, así es. Hemos decidido continuar con nuestros planes y volver a Londres con Troy.
—Lou, cualquier día te dejas la cabeza por ahí. —Dijo Els.
—¿Que pasa?
—¿No buscabas tu móvil? —Me lo lanzó. —Estaba en la nevera. Dentro.
—Ahora lo recuerdo, tenía hambre y... —Me toqué la panza.
—Bobo. —Sonrió. —El avión sale mañana por la tarde.
—Lo sé...
—Vamos a estar bien. —Me abrazó. — Porfin vamos a estar bien. —Susurró en mi oído.
—Yo me encargaré de eso princesa. —Besé su cuello.

Narra Niall

No he podido parar de pensar en Alice desde la última vez que la vi. Por dios, la necesito. La necesito como un loco...
He estado enamorado de ella desde hace años, no quiero esperar ni un segundo más. Estar a su lado es lo único que necesito para ser feliz.
Ya estaba decidido. Me di una ducha, me puse ropa cómoda y salí. Salí a buscarla, a decirle que la quiero tener conmigo. Ya basta de sufrir.
Llegué a la puerta de su casa. Inhale, exhale y llamé al timbre.
—Niall... —Dijo mirándome confundida. No le di tiempo a reaccionar. La agarré de la mano y tiré de ella hasta tenerla en mis brazos.
—Te amo Alice. —Dije y justo después la besé. Ella me correspondió al instante.
—Te amo Niall. —Dijo sonriendo una vez nos separamos. Pero aquello no duró demasiado.
La cogí en brazos y entré en su casa, cerrando la puerta detrás de nosotros. Subí a su habitación y la dejé suavemente en la cama, sin parar de besarla.
—¿Que vas a hacer, Niall? —Pregunto riendo.
—El amor. —Dije y volví a juntar nuestros labios...

Narra Liam

—¿Estás seguro? —Pregunto Zayn.
—No he estado más seguro de nada en toda mi vida bro.
—Es que no sé que necesidad tienes de hacer eso...
—Estar con ella, esa es toda mi necesidad. Sentirla solamente mía. ¿Que mejor que esto?
—Tu allá con lo que haces hermano. Entremos entonces. —Dijo y abrió la puerta de aquella joyería.
Estaba nervioso. Nervioso y emocionado al mismo tiempo. Iba a hacerlo. Porfin iba a hacerlo.
—¿Puedo ayudarles en algo? —Preguntó el dependiente.
—Venimos buscando anillos de compromiso. —Dije.
—Tienen suerte, nos ha llegado una gama totalmente nueva esta mañana. Permítanme un segundo. —Dijo y entró en una especie de almacén que había tras de el.
—Aún puedes arrepentirte y salir huyendo. —Dijo Zayn riéndose.
—No, no soy un gallina como tú. —Lo pique.
—¿Cómo yo? No entiendo a que te refieres.
—Te da miedo comprarle uno de estos a Amber. Admitelo.
—¿Por qué me iba a dar miedo? Acabo de comprarle una casa.
—Porque te da miedo que te diga que no. Lo de la casa es distinto, si algo sale mal simplemente tiene que recoger sus cosas y marcharse. Si le pides matrimonio y os casais es otra cosa. Tienes miedo de que no quiera ser oficialmente tuya. Heriria tu orgullo.
—Venga ya.
—Sabes que es verdad.
—Aquí tienen jóvenes. —Dijo y puso un gran expositor frente a nosotros.
—Quién no arriesga, no gana. —Dije.

(...)