domingo, 16 de febrero de 2014

Capítulo 29. "Felíz baile de invier[no]" Primera parte.

Narra Niall

Justamente acababa de arreglarme para el baile, cuando escuché el timbre.
—Sophia, abre!
—Abre tu!
—Vaga. —Gruñi bajando las escaleras. A veces me sacaba de quicio.
—Te he oido idiota.
—BIEN! —Dije y abrí la puerta. Era Liam. —Hola Peine, pasa.
—Y tu hermana?
—Aún se está arreglando, siéntate y ponte cómodo, aún puede tardar varias décadas más.
—La espera merecerá la pena. —Se sentó. —Y tu que, ya tienes pareja? O es que piensas bailar sólo? Porque te recuerdo que es un baile.
—Ya veré lo que pasa cuando llegue allí.
—Tienes la esperanza de encontrarte con Alice, no?
—La verdad si, pero supongo que ella tendrá pareja. Tampoco la puedo culpar ni mucho menos por ello.
—Ya te lo dije Niall.
—Te encanta decir eso, verdad? —Bufe.
—Ya ves. —Dijo riéndose.
Unos minutos más tarde Sophia bajó las escaleras. Creí que tendría que ir a por un cubo para recoger las babas que Liam desprendía. Estaba estático, sólo mirándola sin decir una palabra. Le metí una colleja para que dejara de mirar así a mi hermana. Después de varios alagos por parte de ambos, nos fuimos. Era un momento demasiado violento para mi, ya que mi hermana y mi mejor amigo estaban  demostrandose "afecto" en el asiento trasero del coche. Contaba los minutos para llegar a Santa Mónica de una jodida vez.
—Hemos llegado! —Grité, haciendo sobresaltar a estos dos.
—Que emoción. —Dijo Sophia.
—Fuera de mi coche. —Dije y los tres nos bajamos.
Definitivamente Zayn y la tal Kendall habían hecho un buen trabajo. Todo estaba impresionante.
Ví a lo lejos a los chicos, estaban sentados en una mesa frente al escenario. Me acerqué a ellos.
—Que pasa. —Dije y me senté.
—Hey hey. —Respondio Harry.
—Y tu pareja? —Preguntó Eleanor.
—Uhm, eso me gustaría saber a mi.
—Que no tienes valla. —Afirmó Babi.
—Básicamente.
—Mira disimuladamente hacia tu derecha. —Me pidió Louis.
No lo entendí muy bien, simplemente me límite a girar la cabeza como un caballo desbocado. Fué entonces que comprendí. Alice venía hacia nosotros. Traía puesto un vestido corto, negro, con un poco de escote y la espalda descubierta.
—Hola chicos. —Dijo sonriendo y después me miró. —Estás muy guapo duende.
—Tu... Tu más. —Logré decir.
Ella sólo se rió un poco y se fué a saludar a los demás.
—Diselo. —Dijo Babi.
—Decirle el que?
—Eres un poco cortito de mente chico. Dile que la quieres, o te arrepentirás.
Me levanté de la mesa y me fuí directo hacia ella. Total, que podía perder? La cogí del brazo y me la llevé al balcón de la azotea.
—Que pasa? —Preguntó.
—Tengo algo que decirte.
—En realidad... Yo también.
—Tú primero entonces.
—Está bien... Niall, mi padre me ha conseguido una plaza en Julliard, una escuela de musica en Nueva York... Una de las mas importantes del mundo...
—Que quieres decir con eso?
—Me... Me voy Niall. Me voy a Julliard.
—Te vas?
—Si y la cosa no acaba ahí. Llevo años queriendo confesarte algo pero tenía miedo de tu reacción. Supongo que ya no importa... Niall, estoy enamorada de ti. Siempre lo he estado.
—De verdad...? —Dije con la voz rota.
—De verdad. Desde que éramos pequeños. Aún vivíamos en Irlanda... Por ti soy quien soy, por ti es que me he atrevido a venir aquí. Tu eres la primera persona que me escuchó cantar... —Suspiró. —Aún no se lo he dicho a tu hermana.
—Soy el tío más estúpido del mundo. Yo tambien estoy enamorado de ti, siempre lo he estado. Ojalá me hubiera atrevido a decírtelo. —Se quedó paralizada, mirandome. —Esto es culpa mía.
—No Niall, es de los dos.
Limpie una las lágrimas que caían por su mejilla y la abracé con la intención de no soltarla nunca.
—Déjame besarte. —Le susurré.
—Sólo hazlo. —Dijo mirándome directamente a los ojos.
Puse ambas manos en sus mejillas y uní nuestros labios. Al principio el beso fué lento, dulce, pero a medida que iba pasando el tiempo, se tornó apasionado. Ambos queríamos encontrar la forma de estar más juntos, más unidos...
—Quiero pasar mi última noche en Los Angeles contigo. —Pidió Alice y yo asentí.
—Te quiero. —La abracé de nuevo para después guiarla hasta mi coche.

Narra Louis

Eleanor y yo estabamos bailando en la pista. Todo iba genial hasta que ví un rostro a lo lejos, un rostro que me encantaría poder borrar del mundo, del sistema solar y del universo. Alex. No me gustaba para nada la forma en la que miraba a Eleanor, y el hecho de que haya sido su novio me gusta mucho menos. De repente noté a Eleanor desplomarse en mis brazos. La cargué y la senté en la silla más cercana.
—Estás bien?
—Sólo ha sido un mareo, nada importante.
—Como que nada importante? Un mareo podría ser el efecto de algo serio. Has comido algo en mal estado?
—No, no es eso y tampoco es nada malo. No ante mi perspectiva al menos.
—Que quieres decir con eso?
—Es sólo una sospecha, pero creo que podría haberme quedado embarazada Lou. —Soltó dejándome en puro estado de Shock. Embarazada? Mierda, no utilice protección...
—Está bien, no te preocupes. Iremos al médico y nos aseguraremos de que todo esté bien.
—Y si realmente lo estoy?
—Nos haremos cargo. —Le sonreí. —Quiero decirle a los chicos que estamos embarazados.
—Ey, ni siquiera es seguro. —Contestó riendo y me besó.
Realmente no tenía problema con la idea de ser padre. Estoy encantado de que la madre de mis hijos se llame Eleanor Calder.

(...)

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